El acto religioso fue oficiado por el
párroco Evaristo Arache, quien motivó a los agentes a continuar cumpliendo con
su deber con entrega y vocación.

Por su parte, el general Wandy Madé
Montilla, director regional Este, expresó su agradecimiento al presidente Luis
Abinader y al director general de la Policía, mayor general Ramón Antonio
Guzmán Peralta, por el respaldo brindado a la institución del orden.

Asimismo, elevó una oración por los
agentes caídos en el cumplimiento de su deber y destacó el apoyo y la
colaboración de la ciudadanía.

La ceremonia congregó no solo a un
gran número de uniformados, sino también a familias, personal administrativo y
autoridades de la institución, quienes se dieron cita para encomendarse al
santo de las causas difíciles y desesperadas.

La iglesia Santa Rosa de Lima, ubicada
en el corazón de la ciudad, fue el escenario donde la fe y el servicio se
unieron, reafirmando el compromiso de la Policía Nacional no solo con la
seguridad ciudadana, sino también con sus principios espirituales más
arraigados.

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