Pese al
discurso de crecimiento económico, solo en el 2024, la Dirección de Desarrollo
Social Supérate gastó para programas sociales más de 50,000 millones de pesos.
Solo para Aliméntate, con 29,679.4 millones de pesos, y Bonogas, con 7,434
millones, se destinaron más de 37,113 millones de pesos en ese año.

Ese total es
el doble de los aproximadamente 18,200 millones que el Gobierno dejaría de
recaudar en el año si cumpliera con la Ley 11-92 del Código Tributario, que
establece la indexación salarial anual para ajustar el monto de los sueldos
exentos del impuesto sobre la renta (ISR) y el porcentaje de los que tienen que
pagarlo, calculo estimado por el economista Richard Medina

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